Cómo lo sabemos, para comprar el diamante ideal, la gente hace diversas decisiones que los lleva a elegir el diamante perfecto. Durante este proceso es muy común malentender importantes conceptos , para crear falsas expectaciones o arrepentirse al tomar una decisión por adelantado.. Todas estas pueden ser el resultado de una mala compra debido a los errores que comúnmente las personas hacen cuando se trata de comprar un diamante.

En Didiamant, no solo proveemos consejos a través de nuestros expertos, sino que también disfrutamos de compartirles información en orden que nuestros clientes estén preparados para tomar una sabia decisión y obtener los mejores tratos. Es por eso que te invitamos que eches un vistazo a "Los 7 errores más comunes cuando se compra un diamante"

Calificar el corte del diamante es una de las características más difíciles de medir. Debido a su dificultad, hablar del corte puede llevarnos a malentendidos o ignorancia pero eso no quiere decir que no es importante, deecho es el principal agente que determina el brillo y resplandor de tu diamante. Aquí están algunos errores comunes cuando se trata del corte del diamante:

• Juzgar el corte con la comparación. Si tienes 4 diamantes en frente de ti, y eliges el que tiene se ve mejor, no quiere decir que es un diamante con un buen corte, significa que elegiste la mejor opción entre los demás. Más vale que preguntes por el certificado para asegurarse del corte oficial clasificado.
• Elegir un diamante de corte profundo. Pueden ser menos costosos, pero esconden un peso en su figura desproporcionada que parece más chico que otro diamante de buen corte con el mismo número de quilates.
• Falta de inventario. En joyerías te muestran lo que tienen, y mantener diamantes con un buen corte en inventario es costoso, así que intentaran venderte lo que tengan ahí. En cambio, nosotros en Didiamant tenemos más de 10,000 opciones de diferentes diamantes que definitivamente encajaran en lo que estás pensando.

2. Confiar solo en tus ojos

La claridad y el color no son fáciles de clasificar cuando al ver el diamante  los ojos no están entrenados. Para calificar la claridad debes revisar el diamante con un lente de aumento, pero eso no te asegura que detectará todas las inclusiones y para identificar el color debes de comparar al menos dos diamantes para notar la diferencia. En cualquiera de ambas situaciones, inspecciona el diamante sin el anillo de esa manera lo harás mejor.

La recomendación es no confiar en tus ojos al menos que tengas el certificado en tus manos y si tienes algún problema detectando las inclusiones o reconociendo el color, pide ayuda. En Didiamant nuestro gemologos están listos y entrenados para ayudarte y así proveerte el mejor consejo para que tomes la decision correcta.

3. Creer que el vendedor es un experto

La persona detrás del escritorio puede saber más de diamantes que tú, puede haber algunas excepciones, pero en la mayoría de los casos no es así. Algunos pueden ser Gemologos graduados de GIA y otros pueden ser solo ejecutivos de venta. Es por eso que únicamente debes comprar el producto y pedir información de alguien en quien confíes, porque desde que La Comisión Federal de Comercio establece que las características evaluadas por vendedores de joyería pueden variar 1 clasificación de lo que un evaluador calificado, pueden manipular la clasificación para aumentar las ventas. Para asegurarte de tener la clasificación exacta de cada característica, pregunta por el certificado. En caso de que busques más información, necesites ayuda extra o una segunda opinión, pregunta por los expertos en diamantes de Didiamant gratuitamente, será un placer ayudarte en esta cuestión tan importante.

4. Mirar bajo una luz inadecuada

LaS joyerías son PUNTOS DE VENTA, sus objetivos son vender y solo vender. Es por ello, que están preparados con las mejores luces para que sus diamantes se vean espectaculares y conquisten tus ojos. Para ver el verdadero resplandor y el brillo del diamante, intenta acercarte a una ventana o un lugar con luz del sol, inclusive una luz estándar de oficina e ayudará a ver el verdadero brillo del diamante.

Si estás comprando en línea, no tienes que preocuparte por cometer estos errores, si no que puedes estar seguro de que lo que estás comprando llenará completamente tus expectativas. Para que no tengas preocupaciones, las pólizas de Didiamant incluyen un 100% de garantía de devolución por cualquiera que sea tu motivo. Puedes elegir entre cambiar tu diamante por otro o puedes pedir tu dinero de regreso sin ningún problema.

5. Asumir que todos los certificados son lo mismo

Si estás interesado en un diamante sin certificado, entonces no deberías preocuparte por esto, pero si lo estás deberías saber que no todos resultan con el mismo grado de clasificación. Cada laboratorio tiene sus propias políticas, una son bastante estrictas mientras que otras son muy pobres. El más seguro y reconocido es el Laboratorio GIA.

Cuando se trata de GIA, debes saber que puedes encontrar reportes oficiales y certificaciones realizadas por gemologos entrenados de GIA. La diferencia es que uno es oficial de laboratorio y el otro es del gemólogo, no de la institución misma.

Ahora, si estás a punto de comparar dos diamantes, asegurate de que ambos estén certificados por el mismo laboratorio, de que tengan la misma cualidad y misma figura, de otra manera será como si comparas dos cosas totalmente diferentes.

6. Tomar el precio final en seguida

Cuando se trata del precio, hay una remarcable diferencia entre los precios que ofrecen en las joyerías y en las joyerías online. Es muy común no encontrar el precio marcado en las joyerías, de hecho algunas veces los precios son calculados por los ejecutivos de venta frente a ti dependiendo de lo que ellos creen que puedes estar dispuesto a pagar; en este caso te recomendamos que uses tus habilidades de negociación para bajar el precio si es posible, no tomes el precio final en seguida. Pero si compras online, los precios son más bajos, con precios ya establecidos, mismos precios para todos y algunas veces puedes encontrar ofertas especiales.

Para saber si tendras que negociar o solo seleccionar el precio, tienes que decidir si comprar online o no. Los diamantes nunca son ofrecidos a menor precio que su valor donde sea que los vendan, pero en las joyerías usualmente doblan el precio debido al servicio cara a cara que ofrecen, la renta del lugar, la experiencia y todo lo que incluye en ella. La ventaja es que puedes ver el diamante al instante cuando visitas la tienda. Por el otro lado, los vendedores online te brindan un servicio personalizado a través de chat, emails o teléfono para educarte y ayudarte con tu decisión. Proveen información acerca de tu diamante, algunas como Didiamant incluyen la garantía de devolución y además precios más bajos.

Ahora es tiempo de continuar la búsqueda de tu anillo, tomando en cuenta estos errores comunes y advertencias en mente para tomar la mejor decisión ya que veras el diamante por el resto de tu vida. Pregunta cuantas veces quieras para estar claro durante la selección y que elijas el mejor!